LECCIÓN 334
Hoy reclamo los regalos que el perdón otorga.
- No esperaré ni un solo día más para encontrar los tesoros que mi Padre me ofrece.
2Todas las ilusiones son vanas, y los sueños desaparecen incluso
a medida que se van tejiendo con pensamientos basados en percepciones falsas.
3No dejes que hoy vuelva a aceptar regalos tan míseros.
4La Voz de Dios les ofrece Su paz a todos los que escuchan y eligen seguirlo.
5Esto es lo que elijo hoy. Y así, voy en busca de los tesoros que Dios me ha dado.
- Busco sólo lo eterno.
2Pues Tu Hijo no podría sentirse satisfecho con menos de eso.
3¿Qué otra cosa, entonces, podría brindarle solaz, sino lo
que Tú le ofreces a su desconcertada mente y a su atemorizado corazón,
a fin de proporcionarle certeza y traerle paz?
4Hoy quiero contemplar a mi hermano sin mancha alguna de pecado en él.
5Eso es lo que Tu Voluntad dispone que yo haga, pues así es
como podré contemplar mi propia impecabilidad.
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