LECCIÓN 331
El conflicto no existe, pues mi voluntad es la Tuya.
- Padre, ¡qué absurdo creer que Tu Hijo podía causarse sufrimiento así mismo!
2¿Cómo iba él a poder planear su condenación sin que se le
hubiera provisto de un camino seguro que lo condujese a su liberación?
3Me amas, Padre,
4y nunca habrías podido dejarme en la desolación, para morir
en un mundo de dolor y crueldad.
5¿Cómo pude jamás pensar que el Amor se había abandonado a Sí Mismo?
6No hay otra voluntad que la Voluntad del Amor.
7El miedo es un sueño, y no tiene una voluntad que pueda
estar en conflicto con la Tuya.
8Estar en conflicto es estar dormido; la paz, estar despierto.
9La muerte es una ilusión, y la vida, la verdad eterna.
10Nada se opone a Tu Voluntad.
11El conflicto no existe, pues mi voluntad es la Tuya.
- El perdón nos muestra que la Voluntad de Dios es una sola y que la compartimos.
2Contemplemos los santos panoramas que hoy nos muestra el
perdón, de modo que podamos encontrar la paz de Dios.
3Amén.
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