LECCIÓN 319
Vine a salvar al mundo.
- He aquí un pensamiento del que se ha eliminado toda traza de
arrogancia y en el que sólo queda la verdad.
2Pues la arrogancia se opone a la verdad.
3Mas cuando la arrogancia desaparece, la verdad viene inmediatamente
y llena el espacio que, al irse el ego, quedó libre de mentiras.
4Únicamente el ego puede estar limitado y, por consiguiente,
no puede sino perseguir fines limitados y restrictivos.
5El ego piensa que lo que uno gana, la totalidad lo pierde.
6La Voluntad de Dios, sin embargo, es que yo aprenda que lo
que uno gana se le concede a todos.
- Padre, Tu Voluntad es total.
2Y la meta que emana de ella comparte su totalidad.
3¿Qué otro objetivo podrías haberme encomendado sino la salvación del mundo?
4¿Y qué otra cosa sino eso podría ser la Voluntad que mi
Ser ha compartido Contigo?
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