LECCIÓN 264
El Amor de Dios me rodea.
- Padre, estás delante y detrás de mí, a mi lado, allí donde me
veo a mí mismo y dondequiera que voy.
2Estás en todo lo que contemplo, en los sonidos que oigo y
en cada mano que busca la mía.
3En Ti el tiempo desaparece, y la idea del espacio se vuelve
una creencia absurda.
4Pues lo que rodea a Tu Hijo y lo mantiene a salvo es el Amor Mismo.
5No hay otra fuente que ésa, y no hay nada que no comparta
Su santidad, nada que se encuentre aparte de Tu única creación o que
carezca del Amor que envuelve a todas las cosas dentro de Sí.
6Padre, Tu Hijo es como Tú.
7Hoy apelamos a Ti en Tu Propio Nombre, para estar en paz
dentro de Tu eterno Amor.
- Hermanos míos, uníos a mí en este propósito hoy.
2Ésta es la plegaria de la salvación.
3¿No deberíamos acaso unirnos a lo que ha de salvar al mundo
y a nosotros junto con él?
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